Los niños diagnosticados con autismo han variado los síntomas que en última instancia, contribuir a alcanzar el diagnóstico de un trastorno del espectro autista (TEA). Los síntomas del autismo suelen aparecer antes que un niño de 3 años y durar toda la vida. Los niños con autismo pueden mostrar una amplia gama de síntomas, que pueden variar en severidad de leve a incapacitante.
Los síntomas generales que pueden estar presentes hasta cierto punto en un niño con autismo son:
- Dificultad con la comunicación verbal, incluyendo problemas con el uso y comprensión del lenguaje.
- Incapacidad para participar en una conversación, incluso cuando el niño tiene la capacidad de hablar.
- Dificultad con la comunicación no verbal, como gestos, expresiones faciales y el contacto de ojo a ojo.
- Dificultad para la interacción social, incluidas las relativas a las personas ya su entorno.
- Incapacidad para hacer amigos y prefieren jugar solos.
- Formas inusuales de jugar con los juguetes y otros objetos, como los que sólo les alineación de una determinada manera.
- La falta de imaginación.
- Dificultad para adaptarse a los cambios de rutina o en un entorno familiar, o una insistencia irracional en seguir rutinas con detalle.
- Patrones repetitivos de comportamiento, o los movimientos del cuerpo, tales como aleteo de manos, dando vueltas, y golpearse la cabeza.
- Preocupación por los objetos poco comunes o partes de objetos.
Los investigadores también estiman que entre 56% y 83% de los niños con trastornos del espectro autista experiencia trastornos del sueño, incluida la negativa a ir a la cama, levantarse de la cama, rabietas al acostarse, levantarse temprano, lo que requiere un padre a dormir con el niño y la hiperactividad en noche (Schreck y Mulick, 2004) (Taira y col., 2008). Esto puede crear dificultades no sólo en el momento mismo del día en que la relajación es más necesario, pero no tener un sueño adecuado puede tener efectos perjudiciales para padres e hijos.
Entonces, ¿qué tiene eso que ver con la dopamina? La dopamina es un químico que es a la vez una hormona y neurotransmisor uno. La dopamina es importante para el normal funcionamiento de las neuronas, y desempeña un papel en la transformación de las neuronas en. También es un componente vital en muchas funciones del sistema nervioso, incluyendo el estado de ánimo, el sueño, el movimiento y la motivación.
Según la investigación realizada por el Instituto de investigación del tacto publicado en la revista International Journal of Neuroscience, disminuye el cortisol y serotonina y aumentar la dopamina después de la terapia de masajes (Field et al., 2005). Esto no sólo aumento de la dopamina contribuir a los patrones de sueño de los niños en el espectro del autismo, pero la terapia de masaje también puede afectar sus niveles de ansiedad debido a la disminución de la hormona del estrés cortisol. Terapia de masaje puede proporcionar relajación, disminución de la ansiedad y la dopamina que pueden ayudar en el sueño adecuado y reparador.
Los síntomas generales que pueden estar presentes hasta cierto punto en un niño con autismo son:
- Dificultad con la comunicación verbal, incluyendo problemas con el uso y comprensión del lenguaje.
- Incapacidad para participar en una conversación, incluso cuando el niño tiene la capacidad de hablar.
- Dificultad con la comunicación no verbal, como gestos, expresiones faciales y el contacto de ojo a ojo.
- Dificultad para la interacción social, incluidas las relativas a las personas ya su entorno.
- Incapacidad para hacer amigos y prefieren jugar solos.
- Formas inusuales de jugar con los juguetes y otros objetos, como los que sólo les alineación de una determinada manera.
- La falta de imaginación.
- Dificultad para adaptarse a los cambios de rutina o en un entorno familiar, o una insistencia irracional en seguir rutinas con detalle.
- Patrones repetitivos de comportamiento, o los movimientos del cuerpo, tales como aleteo de manos, dando vueltas, y golpearse la cabeza.
- Preocupación por los objetos poco comunes o partes de objetos.
Los investigadores también estiman que entre 56% y 83% de los niños con trastornos del espectro autista experiencia trastornos del sueño, incluida la negativa a ir a la cama, levantarse de la cama, rabietas al acostarse, levantarse temprano, lo que requiere un padre a dormir con el niño y la hiperactividad en noche (Schreck y Mulick, 2004) (Taira y col., 2008). Esto puede crear dificultades no sólo en el momento mismo del día en que la relajación es más necesario, pero no tener un sueño adecuado puede tener efectos perjudiciales para padres e hijos.
Entonces, ¿qué tiene eso que ver con la dopamina? La dopamina es un químico que es a la vez una hormona y neurotransmisor uno. La dopamina es importante para el normal funcionamiento de las neuronas, y desempeña un papel en la transformación de las neuronas en. También es un componente vital en muchas funciones del sistema nervioso, incluyendo el estado de ánimo, el sueño, el movimiento y la motivación.
Según la investigación realizada por el Instituto de investigación del tacto publicado en la revista International Journal of Neuroscience, disminuye el cortisol y serotonina y aumentar la dopamina después de la terapia de masajes (Field et al., 2005). Esto no sólo aumento de la dopamina contribuir a los patrones de sueño de los niños en el espectro del autismo, pero la terapia de masaje también puede afectar sus niveles de ansiedad debido a la disminución de la hormona del estrés cortisol. Terapia de masaje puede proporcionar relajación, disminución de la ansiedad y la dopamina que pueden ayudar en el sueño adecuado y reparador.